
A veces lucía el Sol. Otras veces, no.
Habitaban el lugar unos seres extraños,
de cabeza alta y boca grande.Eran de colores, de claroscuros, de estampados y de matices.
Pero sus ojos sólo podían ver en blanco y negro, así que ellos, desesperanzados, gritaban por su gran boca y alzaban aún más sus cabezas.
- PROBABLEMENTE SEA MENTIRA... ¿no?